EL NIHILISMO HA MUERTO
(Y los porteños lo mataron)

Se preguntaba Nietzsche “¿Que significa nihilismo? Y se respondía: “Que los valores supremos pierden validez”... * Pero, se lo interprete como se lo interprete, este texto esboza (o se inscribe en) una teoría de la cultura. “Valores”, pensados como quiere Nietzsche, solo pueden ser “valores culturales” ¿O acaso existen “valores” que no sean culturales?
Así, a 120 años de su enunciación, este proceso de transmutación (y su consecuente asesinato divino) ya debería estar plenamente vigente en nuestra cultura. ¿Pero lo esta? ¿Verdaderamente, “Dios ha muerto en el corazón de los hombres”? Esta fue nuestra pregunta de investigación. Quisimos saber si, al menos entre los porteños, la Fe en un Dios Único como Arkhé; como fundamento, estaba vigente o si se había cumplido la predicción Nietzscheana y los humanos porteños vagaban por la ciudad con el corazon vacio....

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Fecha de publicación: 12/05/2007 - Comentar/ Ver Comentarios

EL SENTIDO AUSENTE
(O el rol de los intelectuales en la era de la mutación)

Vivimos tiempos confusos. Son tiempos de mutación y duda. El fracaso de los grandes relatos nos ha dejado en manos de pequeños relatos. Miles de ellos. Y estos tampoco consiguen legitimarse en los términos de coyunturalidad y transitoriedad que ellos mismos proponen asignarle al estatuto de la verdad. Y peor aun, decir que todos los relatos son relativos, ¿no es, fatalmente, una proposición absoluta en tanto predica sobre la totalidad? O debemos interpretar esto como queriendo decir “todas las proposiciones son relativas y esta también lo es”; procedimiento que invierte el sentido original ya que si una proposición que relativiza el valor de verdad de toda proposición incluido el valor de verdad de tal proposición, se instaura la posibilidad de una cuyo valor de verdad no sea relativo sino absoluto ya que la misma que declara su imposibilidad se declara a si misma incierta.

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Fecha de publicación: 2/01/2007 - Comentar/ Ver Comentarios

HEGEMONIA Y EXTERMINIO
(O porque el holocausto es solo la mitad de la historia)

La proposición “Somos el pueblo elegido (de Dios)”, es, sin duda la proposición fundacional, o si se quiere, el fundamento, en el sentido fuerte, de la constitución de la identidad colectiva del Judaísmo. Después se agregaron otros atributos, pero no son más que eso: atributos. Su constitutivo fundacional es aquel: “el pueblo elegido de dios”.
Es su razón de ser: han sido elegidos por una razón, con un propósito y con una misión. Ser judío es realizar esa misión en su imposibilidad: ser un Justo. Así, con mayúsculas. El plan Divino necesita, para justificarse, esta raza de justos. Así, nacer Judío implica una condición diferenciadora de los otros humanos.
Pero además, este pueblo “elegido” (y aquí pueblo equivale a “etnia” ya que se refiere a los hijos de Abraham); no ha sido elegido por un dios entre otros sino por el “Dios Único”. Esto cancela, simbólicamente, la posibilidad de existencia de cualquier otro “pueblo elegido de dios” ya que se requeriría la existencia otro dios “elector”...

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Fecha de publicación: 20/4/2007 - Comentar/ Ver Comentarios

"LOS CUATRO ESCENARIOS"

¿Sobre que se configura hoy en argentina el escenario político en términos de sus principales determinantes? Resulta obvio que el grado de aprobación popular del Presidente es un componente central. Así, conforme varíe su prestigio variara también el escenario que contribuye a configurar. El otro componente central lo constituye la oposición, considerada esta en tanto su coherencia y fortaleza. Nuevamente, la suerte favorable o adversa que corra sera también determinante. Hoy pareceria sugir la figura de Lavagna.

Estos dos componentes serán los factores centrales que determinaran los posibles escenarios sobre el que se desplegara la lucha por el poder durante el próximo año y medio...

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Fecha de publicación: 10/01/2007 - Comentar/ Ver Comentarios

"LA NORMA Y LA MUERTE"

Hace unos años, en una de las tantas inundaciones que sufrió la ciudad, varios ancianos murieron en un geriátrico. Inmediatamente el Gobierno de la Ciudad envió una banda de diligentes inspectores a recorrer todos los geriátricos de la Ciudad para verificar sus condiciones de seguridad. Varios fueron cerrados, otros fueron multados y algunos intimados, a realizar urgentes reformas.
Hace algo más de un año, el incendio de la Disco Cromagnon dejo 196 victimas fatales. Nuevamente el Gobierno de la Ciudad mando a sus hombres a escudriñar cuanto local de entretenimiento hubiese en la ciudad para exigir el cumplimiento de las normas de seguridad que regulan esos sitios.
Hace unos días, el incendio de un Taller-Prisión dejo varios ciudadanos Bolivianos carbonizados, incluyendo cinco o seis niños. Y, nuevamente, el Jefe de la Ciudad, con el ceño adusto y voz severa, envió a los adalides de la vigencia normativa a las calles.
Admirable accionar de las autoridades. Cierto. Pero también es cierto que en todos los casos las normas que regulaban esas actividades ya estaban vigentes antes de que la muerte se hiciera presente.
¿Es siempre necesario que sea la Muerte la que articula la vigencia formal de la norma con su vigencia efectiva? ...
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Fecha de publicación: 07/01/2005 - Comentar/ Ver Comentarios

“BLUMBERG” DESPUES DE ¡BLUMBERG!
(O, como mediatizar el dolor y construir un sujeto político en el proceso)

I. INTRODUCCION

Señala Alain Badiou que la Política (así, con mayúsculas) ya no es posible en los tiempos que corren. “El voto solo cambia a los apoderados”, dice, citando a Marx cuando este dice que “los gobiernos son los apoderados del capital”.

 “No hay un solo ejemplo en todo el mundo de verdadero cambio político producido por el voto”, insiste Badiou; y concluye “El voto, entonces, no es un acto político. Es un acto importante, pero es un acto estatal. Y entonces hay que diferenciar al acto político del acto estatal (el subrayado es nuestro)...

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Fecha de publicación: 07/09/2004 - Comentar/ Ver Comentarios

"Las Cenizas del Año 2001"

Atardecía ese 19 de diciembre cuando el aún Presidente De la Rúa decretó el estado de sitio y lo que parecía media ciudad salió a la calle, se asomo a las ventanas, ocupo balcones, se junto en esquinas. No había plan, no había análisis político, no había marco ideológico, no había liderazgos y sin embargo hubo accionar coherente. Lentamente, como ríos que convergen desde todos los barrios y a lo largo de toda la noche las columnas de vecinos se volcaron sobre la Plaza de Mayo. Y esto fue, en el sentido más rotundo, un consenso. Decía “Basta, que se vayan todos!”.”
¿Pero realmente fue un consenso? Y antes, ¿Qué entendemos por “consenso”.
El termino que declina del latín “consentire” implica un sentir-con, sentir-juntos; es decir sentir lo mismo que otro. Así, consenso implica como mínimo dos sujetos que interpretan el sentido de un objeto de la misma manera. Y esta operación de atribución de sentido es necesariamente una operación semiótica. Pensado asi, una investigación sobre los motivos de participación en el cacerolazo del 2001 debería encontrar la existencia de un consenso, de una interpretación compartida por al menos una parte significativa del público...

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Fecha de publicación: 12/01/2002 - Comentar/ Ver Comentarios

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